En busca de la ilusión perdida - Antonio Nieto Díaz

Título: En busca de la ilusión perdida.
Editorial: Émepe.
Año: 2015.
Autor: Antonio Nieto Díaz.

SINOPSIS.
Antonio Martín, el marino que descubrió y entregó el oro desaparecido de París, tras diez años de monótona vida familiar en Alemania siente llegar la crisis de los cuarenta y que ha perdido la ilusión. Decide buscar el aliciente para volver a ser el de antes y, de paso, mejorar su delicada situación económica. Regresa a España a visitar a su amigo Perry, del que hace tiempo no recibe noticias. Sin embargo, las aventuras van a llegar antes de que Antonio lo espere, porque Perry ha desaparecido sin dejar rastro. Alguna pequeña pista lo lleva a embarcarse de nuevo y sin esperarlo se ve inmerso en una serie de hechos dentro de una intrigante trama delictiva internacional, hasta llegar a un desenlace sorprendente.

La finalidad de la publicación de esta novela es difundir la labor de la Asociación Española adELA, que trabaja para la promoción de toda clase de acciones destinadas a mejorar la calidad de vida de personas afectadas por ELA (Esclerosis Lateral Aniotrófica). El autor de la novela y la editorial destinarán a adELA todo el importe que generen las ventas de este libro.


OPINIÓN
Hace un tiempo (casi dos años ya, por favor, como pasa el tiempo)  leí El oro de París del mismo autor y lo disfruté mucho (podéis refrescar la memoria aquí). Además que el autor destine, tanto esta vez como la anterior, íntegramente todo el importe de la ventas a luchar contra una enfermedad como la ELA, todavía me parece más loable por su parte.

Han pasado unos años desde la anterior entrega. y Antonio, el protagonista de El oro de París, lleva tiempo en Alemania y viviendo con Marlene, su mujer y su hijo Martín, adjeno a la época convulsa que se vive en España, en la que ETA va sembrando el pánico por todas partes con el atentado al Hipercor de Barcelona.  Pero cuándo tras su cuarenta cumpleaños, Antonio siente que no está viviendo como quería. Las cosas económicamente tampoco le van  bien, y en un arranque típico de "la crisis de los cuarenta", decide volver a España para ver a su amigo Perry y recuperar algo del oro que dejó escondido. Pero cual será su sorpresa cuando al llegar a España, descubre que su amigo ha desaparecido.

Dispuesto a averiguar lo que le ha pasado, decide ponerse a investigar y la única pista que encuentra en el antiguo despacho de Perry, son las iniciales de una compañía naviera, ACL con sede en Valencia, una ruta marcada en un plano y las mismas iniciales en el pozo donde, junto con su amigo, escondió años atrás una parta del oro de Paris. Tras visitar a su primo y hacerle éste un préstamo, decide irse a Valencia, y dada su experiencia como marino y su dominio de idiomas, embarcarse en algún barco de la compañía para hacer la ruta marcada por su amigo.

" Eché una ojeada al mapa de la pared y algo me intrigó. Una cruz roja marcada con bolígrafo en Madrid, otra en Valencia. Recorrí con detalle el resto del mapa y mi sorpresa aumentó al encontrar otras cruces similares en Génova, Roma y Nueva Orleans. Y justo al lado de las cruces aparecían las siglas ACL; las mismas que las del banderín y el cenicero. No tenía ni idea de lo que podían significar aquellas cruces; tampoco debería darle mayor importancia, aunque me parecía raro que en un mapa decorativo alguien hubiera marcado esos signos. Tampoco me encajaba que Perry tuviera algo que ver con empresas marítimas o afición a la mar."

Y una vez conseguido su objetivo, gracias a un montón de argucias, Antonio se va a ver implicado en un asunto mucho mas turbio y peligroso de lo que podía imaginar en un principio.

En definitiva, En busca de la ilusión perdida es una buena segunda parte de El oro de París, llena de aventuras, intrigas, policías corruptos, tráfico de armas e incluso contactos terroristas y que se lee de una sentada. Una novela cortita pero no por eso menos intensa y llena de misterios por resolver, en la que viajaremos con Antonio por medio mundo a la búsqueda de su amigo. Y también, porque no, en busca de la ilusión que parece que Antonio había perdido. Porque muchas veces, nos empeñamos en buscar fuera lo que tenemos dentro de nosotros mismos.

Muchas gracias a Émepe por el envío del ejemplar.