Yonqui - Paco Gómez Escribano

Título: Yonqui.

Editorial: Erein.

Año: 2014

Autor: Paco Gómez Escribano.

Valoración: 8,5/10

SINOPSIS

Canillejas (Madrid) 1978. El Botas tiene 16 años. Es huérfano de padre. El hígado de su progenitor dijo basta en la bodega del barrio. Su hermano murió tiempo atrás de hepatitis C por esa desafortunada  costumbre de compartir las jeringuillas para chutarse. Su hermana se fue a una comuna hipy en Ibiza al cumplir los 18. Convive con su madre, que es una borracha que un día se fuga con un vecino. Es inmigrante de segunda generación, es decir, que sufre desarraigo de las raíces de la tierra de sus padres, y se dedica a dar vueltas por el barrio con sus colegas, el Conejo, el Mecánico, el Pumby, el Porras y el Nani tomando todo aquello que el sistema les niega, en un contexto brutal de crisis y paro. Se dedican a delinquir y ellas, la Morritos, la Orejuda, la Trini, la Charo... la contraparte femenina de la basca, se sacan el sustento en las esquinas aliviando los más bajos instintos de los hombres.

El Botas, un día, se encuentra con la música y con Lola, de la que se enamora. Y estos dos factores le hacen pensar en desengancharse de la droga y llevar una vida sin sobresaltos ¿Lo conseguirá?

OPINIÓN PERSONAL.

Me llegó esta novela por sorpresa de parte de la editorial Erein, y su colección Cosecha Roja, una colección que como ya he comentado anteriormente, no deja de soprenderme por la buena calidad de las novelas negras escritas aquí (preferentemente escritores vascos, aunque éste no sea el caso) que publica.

Debo confesar que cogí este libro con un poco de recelo. Todos hemos visto películas como Deprisa, deprisa, Yo, el Vaquilla... películas que hablan de una delincuencia del los años 70 -80 en España, de chicos muy jóvenes, enganchados a la heroína, y muertos casi todos muy jóvenes, que no hacen nada más para sobrevivir y conseguir sus dosis, que dar palos, en fin... unos quinquis como antes se llamaban.

Me daba un poco de miedo, pues, sumergirme en la vida de estos chicos. Si, ya sé que es una realidad y no debemos mirar para otro lado, está ahí y desgraciadamente mucha gente convive con ella todos los días, pero también debo confesar que me he llevado una grata sorpresa.

No es una novela rosa, está claro, ni el autor quiere contar las cosas como si fueran una película Disney, es una novela dura que nos muestra que las cosas son así y así las cuenta, y no voy a justificar todo el daño que algunas de esas personas hicieron, pero nos encontramos con algo más. Nos encontramos con su vida contada por uno de sus protagonistas en primera persona, no vemos solo la parte que nos enseñan por la tele en programas como Callejeros (por poner un ejemplo). Vivimos su pasado, sus sentimientos, su desarraigo, sus carencias afectivas y familiares, porque las cosas han sido así para ellos cuándo podían haber sido de otra manera de haber nacido en otro entorno y haber contado con otros medios.

" Me lo quedé mirando al puto renacuajo. Le llamábamos Nani porque tenía trece años. Tenía sus colegas pero le gustaba venirse con nosotros de vez en cuándo, se ve que nuestras movidas eran más emocionantes que las que vivía con sus amigos niñatos. Era un nota precoz. Sabía hacer un puente a un coche. Y sabía llevarlo de puta madre. Alguna vez nos había acompañao en algún palo. Seguramente no llegaría a cumplir los dieciseis. Claro, que a su edad, yo pensaba lo mismo. Sobre mí. Y sin embargo ahí estaba yo, sobreviviendo día a día, aunque con menos esperanza de vida que un chute de caballo rodeado de yonquis enmonaos."

Escrita con la manera de hablar de esos chicos, la historia va transcurriendo entre chutes, borrachera, palos, visitas al cuartelillo con palizas incluidas, y perder el tiempo en un barrio dejado de la mano de Dios, en el que ni los taxistas se atreven a entrar. Hasta que un día El Botas, descubre su afición por la música, y descubre el amor en una "piba" de otro barrio, con su misma situación, pero con más aspiraciones y la cosas más claras que él. Y todo esto, le hace replantearse que su vida puede ser otra, que no tiene porque ahogarse en esa situación e intentar cambiar la cosas... aunque nadie dijo que fuera facil.

" Uno se siente muy valiente recién chutao. Después viene el día siguiente. Y el de después. Y la impotencia que se siente cuando te das cuenta de que tu vida es una mierda. De que puedes pasar de comer, hasta de respirar, pero no puedes pasar del caballo."

Una novela que me ha impresionado y me ha enganchado (bueno, aquí quizás la palabra enganchado no quede muy bien), pero así ha sido. La he leído en apenas un par de días, y no he podido dejar de meterme en este subuniverso que tenemos al lado y que, pensamos cuándo lo vemos en la tele o el alguna película, pobres, que pena de vida, pero luego los tenemos en nuestra propia ciudad y los ignoramos completamente, los rechazamos, nos dan miedo...  No nos importa verlos en las noticias, incluso compadecernos de sus familias, pero otra cosa es tenerlos cerca...

Os invito a sumergiros en esta lectura, os aseguro que no os dejará indiferentes.

Muchas gracias a Erein por el envío del ejemplar