Acariciando el cielo - Fernando M. Cimadevila

Título: Acariciando el cielo
Editorial: Desnivel
Año:2014.
Autor: Fernando M. Cimadevila

SINOPSIS.
Nunca hubiera podido imaginar los secretos que ocultaba el cuaderno de viaje de mi hermano, ni de la profunda huella que había dejado a su paso por el Nepal. Bajo la temblorosa luz de las llamas recorrí con la vista aquel trayecto, despertando en mi mente imágenes de lugares que solo había visto en los libros: Katmandú, Namche Bazaar, la aldea de Dingboche... Sus palabras, como ecos del pasado, despertaron en mí la necesidad de ir tras sus pasos. El Himalaya custodiaba la verdad sobre lo ocurrido, un misterio cuyas claves residían en aquel diario por el que algunos estaban dispuestos a matar.
Así comenzó una aventura que cambiaría nuestras vidas, con la esperanza de alcanzar esa cumbre, donde al fin, podríamos alzar la mano y acariciar el cielo.

OPINIÓN PERSONAL.
Hace unos meses, el autor me ofreció su novela para leerla. Ya sabéis que los misterios me pierden, y nada más leer la sinopsis pensé que era una novela que me podría gustar. Y efectivamente, así ha sido.

Al inicio de la novela conocemos a nuestro protagonista (del cual no nos dicen el nombre). Un hombre en la treintena (en sus propias palabras, un capullo integral) agente de bolsa con mucho éxito, y que aparentemente tiene todo lo que puede desear. Se encuentra en París, celebrando el éxito de un negocio, cuándo una llamada desde su oficina le obliga a volver a volver a Barcelona urgentemente: Lehman Brothers ha caído, y con él todo su mundo. Sus acciones caen a un ritmo vertiginoso, sus clientes dejan de confiar en él, es despedido de la empresa donde trabajaba, e incluso su novia lo deja.

" A estas alturas es de suponer que la imagen que tienen de mi, siendo generoso, es la de un capullo integral, algunos estarán planteándose abandonar la historia y otros tratando de averiguar mi e-mail para poder despacharse a gusto. No les culpo, yo en su caso haría lo mismo. Pero, si les sirve de algo, no hay nada más gratificante que ver a un capullo llevándose su merecido, y les puedo asegurar que yo me llevé lo mío."

Arruinado y sin saber con su vida, nuestro intrépido agente de bolsa se dirige a su pueblo natal, en Galicia, donde todavía vive su padre, al que lleva sin ver y sin hablar desde hace dos años, desde la muerte de su hermano Ernesto, durante su expedición para coronar la cumbre al Everest.

Instalado en casa de su padre, con el que no consigue llevarse bien, encuentra una caja con las últimas pertenencias de su hermano, que su padre no ha querido ni abrir. Una noche, y sin que su padre se entere, abre la caja, encuentra el diario de viaje de su hermano al Nepal y se sumerge en su lectura.

Y es en ese cuaderno, donde él y su padre van a descubrir que la muerte de su hermano, no se debió a lo que se contó en su momento...

" Esa última linea sugería que mi hermano no murió en ese desprendimiento tal y como indicaba en informe: sin embargo, sabemos que nunca llegó con vida al campo base. Las preguntas se agolpaban en mi cabeza y una en concreto elevaba su voz sobre el resto. ¿Que le sucedió realmente a mi hermano?".

Una novela cortita, de poco más de 100 páginas, pero muy intensa, donde a la vez que describe maravillosamente los paisajes de Katmandú, sus calles, su ambiente, su gente, y del monte Everest, nos va envolviendo en el misterio de intentar resolver un asesinato. Por tal motivo, podría clasificarse como una novela de viajes, pero también una novela de intriga.

También tienen mucha importancia las relaciones familiares: unas relaciones que por culpa del remordimiento, el trabajo, o el mismo sentimiento de culpa, se van deteriorando.

Me ha gustado aprender cosas de la cultura nepalí que desconocía, como que por ejemplo, cuándo asienten con la cabeza estan diciendo que no, y que cuándo la giran de una lado a otro están diciendo que sí. Una cosa curiosa que debe despistar a muchos turistas.

En definitiva, una novela que me ha sorprendido muy gratamente y que he disfrutado mucho, ya que, aunque no suelo leer novelas de viajes, al estár aderezada con una gran dosis de intriga, le da un toque muy especial. Con un lenguaje fresco y ágil, el escritor sabe como hace llegar hasta el lector los sentimientos de nuestros protagonistas, así como trasladarnos a las desconocidas tierras del Nepal, y casi hasta la misma cumbre del Everest.

Muchas gracias al autor y a la editorial Desnivel por el envío el ejemplar.